18.5.2022
Este día fui a realizar mi turno como patrullero y casi todo fue como de costumbre, la recogida de el uniforme y las paletas. Lo único que cambio es que mi compañero Miguel y yo cambiamos de posición, yo usualmente me encargaba de los padres y el de los peatones pero esta vez yo me encargue de los peatones.
En si me fui bien diría yo, la mayor dificultad que tuve que corregir a los padres que caminaban por la vía, antes era mucho mas fácil ya que solamente tenia que girar la paleta y avisarles cuando podían pasar, pero esta vez me tocaba darles una advertencia verbal lo cual requería mucho coraje ya que desde pequeños nos acostumbran a que corregir a los mayores es indebido e irrespetuoso.
Durante esta actividad descubrí esa debilidad mía, la de corregir a los mayores pero el trabajo en equipo volvió a salir a la ayuda ya que mi compañero Miguel me dijo varios trucos para hacer eso correctamente y también me enseño a como perder el temor de corregir a los mayores
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